sábado, 14 de abril de 2007

Final de la Primeta Parte

Meneka, Ana Bolena, o la tierra de las confusiones.

Un maestro espiritual, un guru o presencia sagrada no debe ser solo esa exaltación de lo divino sobre esta tierra confusa, debe ser también conocimiento puro y cierto de los medios y los caminos que conducen a los adherentes y devotos por el sendero de la paz, prosperidad y santificación.
Sobre estas cuestiones ni los detractores y alegadores pueden tener confusión a menos que exista una intención preexistente. Distinguir entre lo real e irreal, lo falso de lo verdadero, la luz de la oscuridad también es un ejercicio de salud que requiere un esfuerzo supremo. La sociedad actual no ofrece ni el espacio ni el tiempo necesario donde los individuos puedan pausadamente sopesar el pro y los contras. Se impone la velocidad; el resumen sobre el texto total.
Un individuo no puede ser Meneka (la famosa libertina que pretendió engañar al Rishi Visvamitra y al mismo tiempo Ana Bolena que, por mal cálculo, sus días terminaron de un modo impiadoso. No puede ser al mismo tiempo los dos personajes en una sola vida; a menos que sufra de una seria enfermedad mental. Del mismo modo, muchos pretendidos espiritualistas no pueden asumir la espiritualidad desde un espacio de agresión y violencia; de alegaciones indemostrables y desde el desconocimiento absoluto de la pluralidad de la religión de la India. El maestro genuino es aquel que se levanta sobre el magnifico templo a la gloria de Dios dedicado por las generaciones; e instruye sobre el amor y la compasión, aunque su reputación sea tirada a los perros.
Un maestro genuino tiene por fin el llevar a las personas hacia Dios, acercarlos a la refrescante presencia de un Dios que ama; por ello sus palabras son valiosas, perlas que se encuentran solo en la profundidad de una conciencia abierta y de una mente limpia de toda impureza, de pensamientos ajenos, de palabras hirientes, de dobles discursos de engaños y de falsas posturas.
El Maestro se vale de los textos y se vale de la experiencia milenaria, por eso su discurso es ameno y atractivo, por eso sus palabras aunque repetidas resultan siempre nuevas, siempre profundas, siempre manantial de vida que nos conduce a la vida.
Quien lea atentamente los mensajes de Sai Baba descubrirá esta sensación de intimidad y de proximidad. Esto sucede porque habla al corazón del hombre desde el conocimiento profundo.
¿Y de que habla el maestro? De Dios de los senderos que conducen a El.
Pocos observan que cuando decimos pluralismo, pluralidad realmente nos referimos a una sinfonía de matices impensables para una mente estrecha y dogmática.
Contemplemos por ejemplo la palabra “yoga” y todas sus implicancias. Acaso yoga solamente es una seria de contorciones, para mejor el físico?
Este y otros temas esenciales habla el maestro genuino, este y otros temas incluye Sai Baba en sus mensajes frente a cientos de miles de sus seguidores y constituye toda una guía para otros tantos grupos espirituales.
Así, en sus mensajes podemos distinguir casi toda la variedad de yogas. Y podemos comprender que el océano es mas profundo de lo que nuestra mente piensa y que el conocimiento esta llena de policromías capaces de incluirnos siempre.
Veamos los yogas que se pueden distinguir perfectamente en los mensajes de un maestro genuino.



1. Abhâva Yoga
El yoga de la inexistencia
2. Adhyâtma Yoga
El yoga del ser interior
3. Agni Yoga
El yoga del fuego interno
4. Anna Yoga
El yoga de la alimentación
5. Ashtanga Yoga
Yoga de los ocho miembros
6. Asparsha Yoga
El yoga del no-contacto
7. akti Yoga
El yoga del amor y la devoción
8. Bhâva Yoga
El yoga de la condición esencial
9. Buddhi Yoga
El yoga del conocimiento discriminativo
10. Dhyâna Yoga
El yoga de la meditación
11. Ghatastha Yoga
El yoga del cuerpo físico
12. Guru Yoga
El yoga del maestro espiritual
13. Hatha Yoga
El yoga de la disciplina física
14. Hiranyagarbha Yoga
El yoga de Hiranyagarbha
15. Japa Yoga
El yoga de la recitación mística
16. Jñana Yoga
El yoga de la sabiduría
17. Jñâna Dîpti Yoga
El yoga de la sabiduría efulgente
18. Kaivalya Yoga
El yoga de la soledad trascendental
19. Karma Yoga
El yoga de la acción desinteresada
20. Kaula Yoga
El yoga de la escuela Kaula
21. Kriya Yoga
El yoga de la acción ritual
22. Kundalini Yoga
El yoga del poder de la serpiente
23. Lambikâ Yoga
El yoga del néctar de la inmortalidad
24. Laya Yoga
El yoga de la disolución
25. Mahâ Yoga
El gran yoga
26. Mantra Yoga
El yoga del sonido sagrado
27. Nada Yoga
El yoga del sonido sutil
28. Nirodha Yoga
El yoga de la cesación
29. Nyâsa Yoga
El yoga de la proyección mental
30. Pancadashânga Yoga
El yoga de los quince miembros
31. Pâshupata Yoga
El yoga de la secta Pâshupata
32. Prapatti Yoga
El yoga de devoción extrema
33. Pûrna Yoga
El yoga integral
34. Raja Yoga
El yoga real
35. Sahaja Yoga
El yoga de la espontaneidad
36. Samâdhi Yoga
El yoga del énstasis
37. Sâmkhya Yoga
El yoga del conocimiento discriminativo
38. Samnyâsa Yoga
El yoga dela renunciación
39. Samputa Yoga
El yoga de la unión
40. Samrambha Yoga
El yoga del rechazo
41. Saptânga Yoga
El yoga de los siete pasos
42. Shadanga Yoga
El yoga de los seis pasos
43. Shiva Yoga
El yoga de los adoradores de Shiva
44. Siddha Yoga
El yoga de los perfectos
45. Sparsha Yoga
El yoga del contacto
46. Tantra Yoga
El yoga de los Tantras
46. Târaka Yoga
El yoga del signo liberador
46. Yantra Yoga
El yoga de de las representaciones geométricas del cosmos

(ver el trabajo incluido en la biblioteca gayatri sobre este mismo tema)
Y estos mismos yogas, poseen diversidades y sutiles cantidades de matices que a su vez forman otras escuelas.
De estos yogas enseña el Maestro y, enseña porque es Maestro del Yoga, conocedor profundo del alma del tiempo, habitante de un cosmos que se nos presenta mágico, el maestro, golpea al corazón del hombre con palabras de dulzura y enseña el mensaje eterno de una india eterna.
Esta enseñanza no se construye en un día, año o cien; esta sabiduría es parte del saber que conmueve el alma.
¿Enseña Sai Baba el yoga en el sentido amplio como nosotros lo presentamos en este apartado?
Si, solo debemos leer sus obras literarias desapasionadamente. Podemos concluir que Sai Baba es un Yogueshvara o Señor del Yoga y de los Yoguis.
Llegamos asi, a una conclusiòn defnitiva en esta primera parte. Sai Baba es una presencia independientemente si acepto o no su posición filosofica.
Es imposible conocer la profundidad de un mensajero celestial simplemente por los actos externos y, estos actos externos siempre estan de acuerdo con la santidad que es vivencia.
En una segunda parte, analizaremos de un modo critico e independiente a los individuos y los grupos que se forman junto a los maestros espirituales.